viernes, 30 de abril de 2010

El perrito

El perrito dormía plácidamente sobre el mostrador de la mercería, imperturbable incluso a las eventuales caricias de alguna clienta. En eso entró un hombre grandote y simpático que rápidamente nos informó de su profesión, que era la de cantor callejero. Para demostrarlo, entonó con entusiasmo las primeras estrofas de aquella canzonetta que dice "Che cosa bella, la giornatt´al sole...!", en su versión disonante. Sin poder evitar escucharlo, el perrito se incorporó, sorprendido. "Mi hija le ponía canciones de Enya cuando era chiquito" -dijo su dueña. Argumenté que entonces habría que cantarle en galés, pero como el hombre no tenía canciones en ese idioma en su repertorio, buscó en unos papeles y atacó con renovados bríos una versión terrible de "Strangers in the Night". Eso fue demasiado para el pobre animalito, que rápidamente se refugió tembloroso en los protectores brazos de su dueña.

jueves, 29 de abril de 2010

Crepúsculo

Creo que ya lo he dicho en algún momento, pero me gustan mucho las ciudades a la hora del crepúsculo, cuando comienzan a encenderse las primeras lámparas, pero aún queda suficiente luz diurna para ver el contorno de los edificios y el cielo. Me gustan, en particular, las ventanas que comienzan a emerger de las sombras, dejando entrever lo suficiente como para estimular la imaginación. No me canso de recorrer las ciudades a esa hora tan especial, lo cual no quiere decir mucho en sí mismo, ya que es un efecto lumínico que dura apenas unos pocos minutos.

miércoles, 28 de abril de 2010

No era Miles


Iba caminando de regreso a casa al salir de la agencia, cámara en mano, como siempre y al cruzar la calle escuché el inconfundible sonido de una trompeta. Busqué unos instantes con la mirada -podría decir "escaneé", pero queda muy tecno- y lo vi, sentado en la vereda, solo, la gente que pasaba a su lado parecía dar un rodeo para evitarlo. Al cabo de unos momentos comprendí la causa: el pobre muchacho, pese a sus esfuerzos, no tocaba como Miles Davis.

martes, 27 de abril de 2010

Susto II

Sin embargo, y continuando con el tema de ayer, debo decir que, tomada exactamente cuatro fotogramas después, esta otra imagen muestra que no todos los presentes en el festival estaban igualmente asustados, algunos festejaban enérgicamente. Es una prueba más de que no hay que creer demasiado en la "verdad" fotográfica, una fotografía no pasa de ser una selección de algunos aspectos de la realidad realizada por el fotógrafo, de entre las numerosas variaciones posibles.

lunes, 26 de abril de 2010

Susto

Al final de la celebración anual en honor a la diosa hindú Durga, la llamada "Durga Puja", incontables imágenes suyas de cartón piedra son arrojadas a las turbias aguas del río Yamuna, en Delhi, en medio de una polvareda de proporciones épicas.
La niña de la foto, que asistía con su madre al evento, se llevó un susto mayúsculo al ver al forzudo luchando a brazo partido con el león, y no es para menos.

domingo, 25 de abril de 2010

Las fans

Había llegado de visita el papa Juan Pablo II y las monjitas hacían cola en la Plaza Matriz bajo una llovizna fastidiosa y persistente para entrar a la catedral a verlo oficiar misa. Salvando las distancias, parecían fans de algún cantante famoso esperando con indisimulado entusiasmo poder entrar a verlo en concierto.

sábado, 24 de abril de 2010

Fortuna

Fui a hacer un reportaje alli a la vuelta y al pasar por esa pequeña agencia de lotería me asaltó la duda de siempre: ¿no estará esta vez, entre todos esos números en la vidriera, perfectamente anónimo y camuflado entre los otros, el número de la suerte, el que puede cambiar, o cuando menos alterar favorablemente, mi vida? Es posible que desde atrás de los cristales el pobre trate desesperadamente de hacerme señas para que me acerque y lo reconozca, que lo elija a él entre todos los demás porque, para demostrarme su agradecimiento, él me va a ceder su premio. Pero yo no lo reconozco, es inútil, nunca aprendí a distiguir los "buenos"números de lotería de los otros, los miro y remiro y me parecen todos iguales, ¿qué hacer?

viernes, 23 de abril de 2010

Peregrinos

Una vez viajé durante tres días seguidos, apenas cambiando de ómnibus en Sao Paulo, desde Montevideo hasta Lapa, una pequeña población sobre el río San Francisco, en el estado de Bahía, 600 km al oeste de Salvador. Allí se celebraba la fiesta del Bom Jesus, una especie de gran kermesse religiosa anual nordestina que duraba varios días y a la cual acudían fieles de todo el Brasil. La pareja a la izquierda, vestidos ambos con hábitos religiosos, quién sabe de dónde venían, pero atacaban su almuerzo con la energía de quienes gozan de un buen apetito, mientras el muchachito a la derecha, a menos de un metro de distancia de mí, seguramente se preguntaría qué cuernos estaba haciendo "o estranjeiro" de la cámara en vez de seguir comiendo.

jueves, 22 de abril de 2010

Alternativa

Siempre hay una alternativa, un Plan B o como quieran llamarlo. Mis viejos conocidos, los ajedrecistas de 18 de Julio que fotografío con frecuencia, decidieron que por ser domingo había que darle un descanso a las circunvoluciones cerebrales y cambiaron los trebejos por las cartas, lo que además les permitió jugar de a cuatro y festejando alborozados cada mano en voz alta.

miércoles, 21 de abril de 2010

Exhausto

Anteayer tuve que ir, un poco a desgano, porque detesto ese tipo de eventos, a una conferencia de prensa. Quien la ofrecía era el famoso salsero Ruben Blades, que está en Montevideo para dar un concierto. Para mi (agradable) sorpresa, la charla de Blades, un hombre muy interesante y culto que incluso fue candidato presidencial y ministro en Panamá, su país, fue muy entretenida y aunque duró más de una hora y media, no se notó. En cierto momento, el camarógrafo de la foto, tras registrar algunas imágenes, se extendió plácidamente sobre la alfombra a escuchar al músico desde su privilegiada primera fila. Instantes después de que yo tomara la foto, Blades, con humor, le preguntó al esforzado periodista si "¿no querrías una almohadita, para estar más cómodo?". El colega dijo que no, que así estaba bien. Ni siquiera se ruborizó, doy fe de ello.

martes, 20 de abril de 2010

La Virgen del Verdún

Ayer se celebró en Uruguay la tradicional peregrinación al santuario de la Virgen del Verdún, en Minas y aunque no pude darme una pasada por allá a fotografiar, sé perfectamente lo que me perdí, porque he ido en otras oportunidades, incluso para hacer algún reportaje. Eso fue en los tiempos en que llevaba adelante con entusiasmo y regularidad mi ensayo sobre la religiosidad popular en Latinoamérica. Uno de estos días me resuelvo y arranco de nuevo, me prometo.

lunes, 19 de abril de 2010

En las ciudades

Hace un par de años preparé un ensayo fotográfico en forma de CD para llevar a un encuentro de fotografía y que por razones que no vienen al caso finalmente no fue presentado. Lo titulé "En las ciudades" y tiene mucho que ver con los aspectos oníricos que, conscientemente o no, busco registrar en las numerosas y variadas ciudades que he podido visitar a lo largo del tiempo.
Para decirlo brevemente, al reunir determinadas imágenes tomadas en lugares tan dispares como Montevideo, Rio de Janeiro o Delhi, por ejemplo, he buscado recomponer las misteriosas y atrayentes urbes que surgen algunas veces en mis sueños en lo más profundo de la noche, creadas por retazos de cosas que he visto cuando estaba despierto.

domingo, 18 de abril de 2010

El anciano

Sentado en un banco de hierro en la vereda, el anciano se ha dormido. No se parece a cualquiera de esos infelices que viven en la calle, sus ropas son de buena calidad y lucen impecables y bien cuidadas, pero ha vencido la cabeza y tan sólo su bastón lo mantiene en posición y evita el derrumbe. Es posible que al ponerse de pie parezca aún poseído de energía, pero tal como está, parece haberse ido encogiendo sobre sí mismo. El tiempo "esa otra daga", como dijo Borges, es implacable.
Con los ojos cerrados, mirando hacia dentro de sí mismo, puede que vea mejor y más lejos, pero para los demás luce ajeno a todo: al ruido del tránsito, a los transeúntes que pasan apresurados y hablando con animación a su lado. Dormita, simplemente. Quizás sueña.

sábado, 17 de abril de 2010

Extravíos

A veces se utiliza decir en sentido metafórico, por ejemplo, que alguien, la juventud, una generación o hasta una nación han perdido el rumbo, pero decir que un barrio entero se ha extraviado es más inusual. Pero en este caso sería lo correcto, porque inmediatamente después de que fumigaran con entusiasmo contra los mosquitos en el barrio de Paharganj, cerca de la estación de ferrocarril de Delhi, nadie, ni siquiera los perros del barrio, sabía a ciencia cierta hacia dónde se dirigía.

viernes, 16 de abril de 2010

Temibles

La casa de comidas estaba vacía y podría alegarse que era porque la temporada se había terminado, prácticamente, y ya no había turistas, o porque recién caía la noche y aún era temprano. Pero yo sé porqué no había nadie: con lo poco amistosos que lucían los dos leones de guardia a la entrada, ¡quién se iba a animar a pasar, ni pensar en cómo serían los precios!

jueves, 15 de abril de 2010

Lo que vendrá

La película inglesa "Lo que vendrá" (Things To Come, William Cameron Menzies, 1936) se ubicaba en un mundo futuro arrasado por la guerra, un sombrío presagio de lo que realmente ocurriría pocos años más tarde. Del mismo modo y ante el visible retroceso del otoño, que ha permitido a las hordas del frío y la lluvia adueñarse de nuestra ciudad, me permito pronosticar que lo que se viene en los próximos meses será aún peor. Pero del mismo modo que dudo de que mi vaticinio sea errado, dudo que alguien me vaya a dar empleo como futurólogo, por supuesto.

miércoles, 14 de abril de 2010

La escalera

Esta imagen, tomada en la parroquia de Nuestro Señor de la Paciencia, en Montevideo, en 1996, durante un reportaje, podría servir para expresar mis deseos actuales. La escalera parecía conducir al cielo, tomando en cuenta el lugar sagrado donde se encontraba, y precisamente me gustaría poder treparme ahora por ella y llegar hasta allá arriba, hablar con el responsable del mal tiempo y pedirle que se atenga a lo programado en el calendario y haga que cese de llover de una vez, ¡que estamos en otoño, vamos!..

martes, 13 de abril de 2010

El inicio

Pasados el Carnaval y la Santa Semana Criolla de Turismo, el calendario uruguayo se reinicia y dejando atrás las vacaciones y la molicie estival-otoñal, los uruguayos nos aprestamos a encarar la febril (?) actividad del año, apenas interrumpidas, pero únicamente para algunos afortunados, por las vacaciones de julio y primavera. Aciaga perspectiva.
El domingo pasado, hace apenas dos días, la rambla de Piriápolis al atardecer lucía así, calma y autocomplaciente, un buen recuerdo para atesorar durante los lluviosos días de invierno que nos esperan emboscados tras una esquina cualquiera del calendario...

lunes, 12 de abril de 2010

¡Que viva!

Durante la recorrida referida en la entrada de ayer, pude registrar cosas muy interesantes, como esta escena, que parece salida de una película de Buñuel: el toro sale de la vieja casona como un gusano de su crisálida -así pensé en ese momento y me sigue pareciendo lo mismo. ¡Y que viva, nomás!


domingo, 11 de abril de 2010

En el camino

En setiembre de 1976 terminé mis estudios de medicina y ante mí se desplegó un vasto panorama de incertidumbre. En plena dictadura militar, mi carencia de antecedentes "democráticos" me cerraba las puertas laborales en el área de la salud pública y la medicina privada por entonces era casi inexistente, al menos para los novicios como yo.
Como los cursos de la especialidad que había elegido, psiquiatría, no comenzarían hasta marzo, en enero decidí irme de viaje a Perú y Bolivia, animado por la lectura de las obras de escritores "andinos", como Jorge Icaza (Huasipungo), Ciro Alegría (El mundo es ancho y ajeno) y naturalmente, del uruguayo Galeano (Las venas abiertas de América Latina). Aún no había descubierto a Manuel Scorza.
De camino a Machu Picchu entreví panoramas que me llamaron la atención, por lo que decidí recorrer con algo más de calma el valle del río Urubamba (o Vilkanota). Lo hice en parte tomando transportes locales o sencillamente a pie, viajaba liviano.
En una ocasión, caminando a lo largo de la ruta me encontré con esas dos mujeres, madre e hija, y por un rato nuestros senderos coincidieron, pero como nuestros caminos estaban predestinados a divergir, poco después nos separamos para siempre. Ellas siguieron con su vida modesta y probablemente escasa de esperanza, y yo con todas mis buenas intenciones estimuladas por los libros y perfectamente inútiles.

sábado, 10 de abril de 2010

Otoño en la playa

El sol parece hallarse indeciso y se deja ocultar por las nubes cada poco rato, así que decidimos bajar a la playa antes de que esos malevolentes copos de algodón voladores ganen la pulseada y lo tapen del todo. Recién se inicia el otoño, y más adelante habrá tiempo de sobra para disfrutar plenamente de los cielos encapotados y tormentosos.
Estamos en Piriápolis, dueños y señores de las arenas y el mar de una ahora desierta Playa Hermosa. En la radio del auto suenan los compases de una melodía de Louie Bellson, que murió el año pasado, pobre de él y pobres de nosotros, que lo perdimos, aunque por suerte nos quedan sus grabaciones. El agua aún está tibia, acabo de probarla introduciendo tímidamente la punta del pie derecho, el mar no se ha enterado todavía que se ha acabado el verano, y me espera, ya me estoy yendo a nadar, lo demás puede quedar para después .

viernes, 9 de abril de 2010

Amigos

Volvía de hacer una breve nota para la agencia cuando me los crucé. Trabajaban como obreros en un edificio en construcción y aunque declaradamente hinchas de los archi-rivales Peñarol y Nacional, manifestaron ser buenos amigos. Al asomarse a la calle, empero, comenzaron a exponerse, como cualquier otro ciudadano, vamos, a los riesgos de enfrentarse al malhumor y a las caras (u hocicos) de pocos amigos de los demás, pero esos son riesgos a los que todos los habitantes de las ciudades estamos expuestos hoy en día, ya estamos resignados.

jueves, 8 de abril de 2010

En la escollera

No es para nada malo que las fotografías sean extrañas, intrigantes; es más, es un objetivo frecuentemente perseguido, pero no siempre alcanzado. El gran fotógrafo Leonard Freed, en el prólogo de su libro de 1991 dijo que las fotografías, "cuanto más ambiguas, mejor, de lo contrario serían propaganda". La imagen que tomé en la escollera Sarandí pertenece a las que considero logradas en ese aspecto, permiten la especulación (por ejemplo: ¿quién asesinó a los pescaditos que están a la derecha?). (Por fotos de Leonard Freed ir aquí)

miércoles, 7 de abril de 2010

Belo Horizonte

Siempre me provocó una cierta inquietud esta imagen que tomé en una plaza de la ciudad de Belo Horizonte, en Brasil, aunque no sabría decir exactamente porqué.
¿Qué hace esa niña pequeña de expresión de adulta, con ese vestido de volados, tan típico de ciertas zonas del interior del país, en medio de esos hombres de seño adusto y aspecto poco amigable? ¿Son sus parientes acaso, o están ahí casualmente? ¿Qué situación cuyo real significado se me escapa por completo estoy presenciando?
Puede que no haya nada de más y que todo tenga una explicación sencilla e inocente, pero igualmente la imagen me provoca desazón. Posee un sentido ambiguo y eso me gusta, favorece el vuelo de la imaginación.

martes, 6 de abril de 2010

Frialdad

Estaba tomando una serie de fotografías sobre comida italiana en el Uruguay para la revista del diario milanés Il Sole 24 Ore y me tocó ir a registrar la comilona mensual de los miembros de la Società Italiana La Paz, en la pequeña localidad de La Paz, a unos pocos kilómetros de Montevideo.
La joven cantante había sido contratada para animar el almuerzo y se esforzaba para lograrlo, pero cuando sirvieron la raviolada, todos se abalanzaron sobre la comida antes de que se enfriase, estábamos en agosto, olvidándose momentáneamente de la pobre artista. Como sé lo que significa tener, cada tanto, la sensación de que a nadie le interesa mucho lo que uno hace, me sentí inmediatamente identificado con ella.

lunes, 5 de abril de 2010

El gato

Ya cae la noche sobre la ciudad y el felino se apresta, con visible impaciencia, a recomenzar sus recorridas por las bajas azoteas del barrio, en busca de eventuales compañeros -o compañeras- de andanzas, o de malignos roedores a los cuales perseguir y destruir, sin saña, apenas con la eficiencia profesional de siempre, librando así a los humanos que habitan las viejas casas de su presencia pestífera. Un pequeño superhéroe más de las sombras, no siempre reconocido en su justa medida por aquellos que se benefician de su inquebrantable vigilancia.

domingo, 4 de abril de 2010

La ventana

Durante la "Santa Semana Criolla de Turismo", como decía un amigo con ironía, la ciudad estuvo poco menos que vacía, una verdadera delicia para quienes detestamos su tránsito alocado.
El lector de la foto, a quien ya había visto antes por la vuelta esgrimiendo un libro, sentado en un banco de una temporalmente solitaria Plaza Independencia, lucía como un náufrago en una isla desierta. Pero estoy seguro de que él mismo no percibía la soledad, porque estaba muy ocupado asomándose a una ventana de papel que le permitía vislumbrar otros mundos, lejanos y atrapantes.

sábado, 3 de abril de 2010

Rituales

En la pequeña localidad de Copacabana, a 4.ooo metros de altitud y junto al lago Titicaca, del lado Boliviano, existe un famoso santuario católico dedicado a la Virgen de Copacabana, patrona de Bolivia. En un abrupto cerro vecino se han colocado las doce estaciones de la Pasión de Cristo, para que durante la Semana Santa los fieles puedan recorrerlas y orar en cada una de ellas.
En la base de ese mismo cerro, un buen número de yatiris -sacerdotes indígenas aymaras-disponen sus mesitas rituales para que los mismos fieles, tras cumplir con sus rituales católicos, realicen los "otros" ritos, por las dudas. Uno de los yatiris, un hombre alto y muy simpático de quien me hice amigo, me contó que los sacerdotes católicos y ellos conviven en armonía y sin estorbarse en absoluto, algo así como "a la Pachamama lo que es de la Pachamama y a Dios lo que es de Dios", para parafrasear al Crucificado, dando así un buen ejemplo de tolerancia.

viernes, 2 de abril de 2010

Prisa



¿Adónde va toda esa gente, con tanta prisa? Seguro que a trabajar, no. Algunos de ellos están en plena carrera, en tanto que otros, cansados, decepcionados o quizás habiendo alcanzado otro grado de percepción o conocimiento, ya han disminuido la marcha. Alguno incluso se ha detenido casi por completo. Son curiosas las cosas que se pueden ver cuando uno se asoma a las ventanas de los edificios altos, como dijo, o bien pudo haber dicho, James Stewart en La ventana indiscreta (Alfred Hitchcock, 1954) .

jueves, 1 de abril de 2010

Cucha

El dueño del perrito tiene un puestito de venta callejera en plena avenida 18 de Julio y para no dejarlo solo en casa, lo trae consigo al trabajo y lo instala junto a un banco de hierro, como un jubilado más. Indiferente al ruido del tránsito y a la gente que circula apresurada por la vereda, el animalito pasa la mayor parte del tiempo echado con toda tranquilidad y dando muestras de poseer una calma y un distanciamiento dignos de un monje budista.