Cuestión de género

Ahora está en boga, y estoy de acuerdo, discutir la problemática de las relaciones de género y el injustificado predominio del sexo masculino en gran parte de las actividades y decisiones de la sociedad. Hurgando en mi archivo encontré esta foto (un tanto sarcástica, lo admito) que tomé hace ya 32 años relacionada con ese tema, así que puedo jactarme de que de algún modo me adelanté a los acontecimientos.

Cercado

Cercado por un grupo de libros de entre los miles que hay a su alrededor y bajo la atenta mirada de Elvis, Jorge Artola, el propietario de la "cavernosa" librería Diomedes, habla por teléfono, quizás para dar explicaciones respecto a alguna nueva desaparición. Entre los iniciados se comenta discretamente acerca de  algunos bibliófilos demasiado entusiastas que se han aventurado entre las montañas de libros que se apilan en la librería sin que se haya vuelto a saber nada más de ellos.

Siesta

Se echó a descansar en la pradera; el suelo estaba duro debido a la persistente sequía y la sombra de los árboles era escasa, pero de todos modos se acomodó lo mejor posible para recuperar fuerzas antes de proseguir su camino montaña arriba.

Arte en las calles

A pesar de los riesgos ya mencionados, la capital ofrece un sinnúmero de atractivos, entre los cuales destaca la belleza pictórica de sus viejas calles.

Los peligros de la capital

Supongo que soy un caso atípico, pero no hace aún tres días que estoy en el balneario y ya quiero regresar a Montevideo, lo único que me ha rescatado, en parte, del aburrimiento fueron las pocas horas que pude pasar nadando en el mar. Quiero regresar a mi ciudad a pesar de sus tan promocionados peligros, el mismísimo Nosferatu me espera para platicar a la luz de la luna, me dijeron.

Ayudita

Para los cortos de vista, una "ayudita" en la costa permite identificar la silueta que se reorta contra el horizonte, algo así como una especie de "hipervínculo" pero ubicado en el mundo real.

Pancita arriba

Siempre ataviada con su pielcita peluda de todo el año, la pobre Nani sufre del calor más que nosotros los humanos, por lo que no demora mucho en ubicarse frente al ventilador apenas lo enciendo. Le gusta tanto el aire fresco que por las dudas dejo el control del aire acondicionado fuera de su alcance, no vaya a ser que lo encienda cuando no estoy en casa y el consumo de electricidad se dispare, como ella no es el que paga el servicio...

Ritmo playero

Hoy hizo un día realmente hermoso y el atardecer fue espectacular. Medio Montevideo se congregó en la Rambla Sur a tomar el fresco y a pasear y pudieron disfrutar del buen ritmo de este grupo, que no sé cómo se llama, pero tocan muy bien sus redoblantes.

San Valentín

Como hoy se celebra el día de San Valentín, supuestamente patrono de los enamorados, aquí va una foto de mi acervo, un "oldie". La tomé en ocasión de las elecciones universitarias de 1987, las primeras después de la dictadura, frente a la Facultad de Medicina y junto con otra que tomara en las cercanías en 1973, en plena dictadura, fueron publicadas, con un pequeño texto de mi autoría en el semanario Alternativa Socialista, con el que colaboraba ocasionalmente por esos tiempos.

Yemanjá IX

Luego cae la noche y la escena se torna más misteriosa y atractiva, aunque hay que extremar el cuidado para no meter el pie en alguno de los numerosos pozos excavados en la arena para enterrar las velas, muchas de ellas a esta altura ya apagadas o consumidas.

Yemanjá VIII

La mar -o el río, si quieren- estaba picada y no era fácil conseguir que las barcas-ofrendas se alejasen mucho de la orilla, pero igual no importaba, el territorio de la diosa comenzaba en la orilla de todos modos.

Yemanjá VII

Mientras tanto, en los numerosos astilleros improvisados en la arena las pequeñas barcas con ofrendas a la diosa eran preparadas para ser lanzadas al mar.

Yemanjá VI

Las mães de santo llevaban a cabo sus limpiezas, mientras en un segundo plano extraños personajes le conferían al entorno el indispensable aire de misterio.

Yemanjá V

Por momentos todo tenía un aire muy familiar en la playa.

Yemanjá IV

Algunos aguardaban en alguna suerte de "astillero" improvisado sobre la arena y protegidos del sol por un techo, eran algo así como los privilegiados dentro de los fieles.

Yemanjá III

Pues sí, allí estábamos aguardando a que se pusiera el sol y comenzaran las ofrendas. Como se puede ver, éramos una mezcla variopinta de curiosos, fieles, como ya dije, fotógrafos y...de todo un poco.

Yemanjá II

Fieles y curiosos cubríamos cada palmo de la playa.

Yemanjá

Hoy se celebró la fiesta de Yemanjá, a Rainha do Mar y fui a la Playa Ramírez como lo vengo haciendo cada vez que puedo desde 1986 y registré algunas escenas interesantes. Esta imagen, por ejemplo, muestra a una fiel utilizando una aplicación para rezarle directamente a la diosa, o al menos así me lo explicó otra creyente muy amable entre risas. No hay como moverse en un país en el que uno comprende la lengua para enterarse de las cosas que ve...