miércoles, 11 de diciembre de 2013

Puerto de Piriápolis

Lo reconozco, mi mirada es muy sesgada: en lugar de fotografiar los hermosos yates de placer que se alinean en el puerto de Piriápolis, mi cámara encuadra cosas que no tienen nada que ver, botes y barcas de pesca, concreto corroído, hierro viejo y oxidado y otros objetos y materiales de texturas igualmente maravillosas. Es la ventaja de haberla pagado, puedo tomar con ella lo que quiera.