martes, 12 de enero de 2010

Río revuelto

Cambio climático mediante, anoche se desató una tormenta de viento y lluvia que auyentó un poco al calor impertinente de estos últimos días. Si seguimos así, no se va a poder confiar ni siquiera en el calendario gregoriano.
Esta tarde el mar seguía agitado, como para recordarnos que su presencia no es sólo decorativa.
Obviamente no era el momento para bañarse en forma desaprensiva entre tanta ola desordenada, pero como a río revuelto ganancia de pescadores, alguna gente astuta cambió rápidamente el traje de baño por la caña de pescar y corrió a sentarse junto al mar a ver si picaban.