sábado, 5 de diciembre de 2009

El mar

Al caminar por la orilla del agua sobre conchas de mejillones, caparazones de cangrejos y otros restos marinos, el suelo crujía bajo nuestros pies. Estaba nublado y el mar parecía un plato. Me sorprendí tarareando una tonada y no fue sino unos momentos después que la reconocí: era la banda sonora de una película alemana de submarinos que vi en mi infancia, "El tiburón y los pequeños peces", cincuenta años hacia atrás. La letra de la canción repetía un estribillo que decía que "el mar es eterno".
La canción fue creada antes de que tomásemos conciencia de que el mar -al menos como lo conocemos- no es eterno, pero en fin, los recuerdos son como son, no se pueden cambiar.