domingo, 12 de julio de 2020

Un viaje a la India-41


Delhi-4

Paso mis últimos días en la India volviendo a recorrer algunas zonas que me parecieron interesantes cerca de donde me estoy quedando, las dificultades con transporte, o más bien con los conductores  me sigue limitando un poco,  y reuniéndome con algún nuevo amigo y colega de France Presse. Lo cierto es que ya estoy un poco harto de la India, es demasiado exhuberante y complicada, al menos la primera vez. Y también muy distinta a lo que estamos acostumbrados. Por ejemplo, veo estos carteles en inglés en la calle:
"ABORTO-Centro aprobado por el Gobierno", y luego este otro:
"Aquí la determinación prenatal del sexo está prohibida pues se trata de un acto punible". Como este último me parece en extremo misterioso, hago algunas averiguaciones y me dicen que no está permitido determinar el sexo de la criatura antes del parto para que no se proceda a abortar sistemáticamente en el caso de que el feto sea del sexo femenino; en la India las hijas mujeres son un problema, ya que hay que casarlas, darles una dote y luego se van de la casa y pasan a pertenecer a la familia del marido. Así que si son mujeres, abortan. Algo así como violencia de género prenatal. La India es un  país avanzado en muchos otros aspectos y toda una potencia nuclear. Hurra.
Otro aviso a la entrada del elegante y caro restaurante Gaylord en Connaught Place:
"No se permiten armas de fuego u otras armas en el restaurante", y algo más abajo:
"Está prohibido servirles alcohol a los menores de 25"
Finalmente me voy de la India con un cierto alivio. Ha sido un viaje fascinante en muchos aspectos, pero también agotador. Al partir me digo a mi mismo que has sido la primera y última vez que piso el subcontinente, pero claro, como me decían los curas de niño, "el camino del infierno está empedrado de buenas intenciones". En los años siguientes volveré un par de veces más, pero eso ya es otra historia.

Vivir en la calle parece ser toda una institución nacional

Ditto

Una zona muy interesante, Paharganj, junto a la estación de ferrocarril

En la Antigua Delhi

Baño y lavado de ropa en la calle, algo normal de ver

Creo que no todos los pasajeros de ese rickshaw eran del barrio