martes, 29 de julio de 2014

Modelo para armar

Cuando hay temporal en la costa, el pampero hace enojar a las olas que, impotentes para vengarse del emisario de Eolo, se desquitan con los murallones de la Rambla Sur, nuestro humilde malecón. Pueden llegar a hacerlo con tal brío, que sus losas de granito quedan desencajadas y en desorden, así que en forma preventiva, una ordenanza municipal dispuso que se clasificasen para volver a colocarlas en su sitio una vez pasado el meteoro. Eso dicen las malas lenguas, al menos, enfatizando que la medida quedó sin efecto cuando  los funcionarios numeradores se quedaron sin pintura.