miércoles, 30 de julio de 2014

Envidia

Tenía un rato para almorzar y se fue a la rambla a comer algo frente al río-como-mar. Allí, tras quitarse el saco, comer su sandwich y beber su refresco, se quedó mirando con envidia a los bañistas que se refrescaban en las turbias aguas con manifiesto regocijo.