domingo, 6 de julio de 2014

Artigas XIV


Cinco años después de que tomara la foto de la entrada de ayer, retorné al mismo lugar y allí estaba el prócer, aún situado bajo el candelabro de Damocles, pero semioculto tras un escudo disimulado como cartel. Me dió la impresión de que se sentía un tanto acosado, como cuando a él y a sus gauchos los perseguíanlas huestes enemigas y se retiraba hacia el norte, hacia el Paraguay, adonde terminaría sus días solo y olvidado.