lunes, 22 de marzo de 2010

Como perro y gato

Se llevan como perro y gato, es decir, como algunos perros y gatos y son realmente una monada. Se la pasan en grande, echados tranquilamente en la vereda todo el día junto a su dueño, un vendedor de mates, a pocos metros de 18 de Julio. Cada tanto al perro le da por ladrar, me parece que más por hacerse notar que por otro motivo, pero fuera de eso, lo más terrible que les toca soportar son los mimos de los vecinos y los niños que pasan, encantados de verlos tan tranquilos y al alcance de la mano acariciadora.
Eso sí, el tigre de juguete a la derecha, no sé si es del can o del felino.