sábado, 19 de septiembre de 2009

Certamen de belleza-2

Animados por mis manifestaciones de entusiasmo tras cubrir el certamen de belleza de Punta del Este (ver aquí), apenas una semana antes, mis jefes en la revista para la cual trabajaba me enviaron a cubrir otro, esta vez en el interior del país. En realidad el concurso no era sino un apéndice de otra fiesta más entretenida, la cacería de jabalíes que se lleva a cabo todos los años en la localidad de Aiguá. Esta actividad, muy popular en la zona -salvo entre los jabalíes, como es natural- tiene la particularidad de que a las pobres bestias -que no le hicieron mal a nadie, puesto que son herbívoras- las persiguen, acorralan y asesinan alegremente utilizando perros y cuchillos, ya que las armas de fuego están prohibidas, o al menos, mal vistas.
Es en el marco del festival se lleva a cabo precisamente el certamen para elegir a la "reina de la Fiesta del Jabalí" entre las bellezas locales.
Como corresponde a una celebración donde lo central es matar cerdos salvajes a puñaladas con la ayuda de un número variable de perros enardecidos, el pretendido refinamiento de otros concursos similares brillaba totalmente por su ausencia y todo era muy espontáneo, muy natural y muy naif. En fin, que daban ganas de ponerse a llorar y salir corriendo.