viernes, 28 de agosto de 2009

Cajas de sueños 1

La escena me recordó a Lautréamont, salvo que en lugar de la mesa de disección, el jinete y su caja de sueños iban por los alrededores de Fez, más allá de las viejas murallas.
Surrealismo aparte, lo que hacía ese hombre joven no era muy diferente de lo que hacemos muchos de nosotros constantemente, aferrarnos a bienes materiales -similares a ése o de cualquier clase, no importan el tipo ni el precio- como a muletas que nos ayuden a evadirnos de la realidad por algunos momentos.