viernes, 3 de noviembre de 2017

Inconscientes

Echados  bajo los tibios rayos del sol del atardecer, los dos aventureross dormitaban ajenos al peligro que se cernía sobre ellos, apenas delatado por las sombras siniestras que se les iban acercando hasta rodearlos por completo, impidiéndoles así toda posibilidad de ponerse a salvo.