lunes, 12 de octubre de 2015

Diferencias

En Lisboa hay grafiteros, cómo no, algunos muy buenos, otros, no tanto. Pero una cosa que los diferencia de sus colegas uruguayos es que acá (en Lisboa) se respeta todo aquello que no debe ser ensuciado. Sobra el espacio, no es necesario manchar paredes recién pintadas, ni monumentos, ni nada que pertenezca al patrimonio común. Es una de las tantas cosas que creo que marcan la diferencia entre la civilización y la barbarie.