miércoles, 27 de mayo de 2015
Ventanal
Hacía frio en la calle, estábamos en junio, un junio frío como eran los de antes, Pero nosotros, el lector y yo, el de la cámara, estábamos al abrigo en el interior del Sorocabana, iluminados por la espléndida luz que entraba por los grandes ventanales que daban a la Plaza Cagancha. Ya no habrá más cafés con una luz como esa, es algo que pertenece al pasado, afortunadamente registrado por mi cámara y la de otros como yo, que acudíamos atraídos a la luz como insectos.