No es que el joven desnudo quisiera comparar su estupendo físico con el de los demás, pero lo cierto que era imposible evitar hacerlo, esos dos que trabajaban en la explanada no podían de ninguna manera competir con él, al fin y al cabo, era toda una obra de arte.
lunes, 20 de octubre de 2014
El David VII
No es que el joven desnudo quisiera comparar su estupendo físico con el de los demás, pero lo cierto que era imposible evitar hacerlo, esos dos que trabajaban en la explanada no podían de ninguna manera competir con él, al fin y al cabo, era toda una obra de arte.