sábado, 2 de noviembre de 2013

Esquina




Aunque con el tiempo cambie, inevitablemente, para mí Montevideo seguirá siendo una ciudad en la que los balaustres de las azoteas de las viejas casas de una planta asoman entre el follaje de los plátanos, así como a Borges le hacía pensar en "tardes con luz de patio".