martes, 11 de junio de 2013

El guardián de la playa

Se va, se va el otoño...son los últimos días soleados antes de que se desencadene el invierno con sus vientos y nieves (bueno, no tanto). La playa está sola, apenas visitada por los últimos de los últimos turistas y, naturalmente, por algunos audaces residentes. Está sola pero tranquila, se siente protegida, pues el temible león alado está allí, siempre atento y vigilante, que para eso le pagan, vamos.