miércoles, 6 de marzo de 2013

Refugiadas

Más que un grupo de turistas, parecían refugiadas de una catástrofe. Y quizás en cierta forma lo eran, pues, ¿acaso no es una catástrofe tomarse vacaciones en la playa en marzo, mes reputado como confiable, y encontrarse de cara al viento, que torna la playa inhóspita y las aguas inaccesibles? Amigas, reciban toda mi solidaridad y simpatía.  ¡Esto no debe tolerarse, elevemos una queja a las autoridades correspondientes, y si nadie nos hace caso, acudiremos a la prensa!