Mi abuelo, don Panta, que supo ser médico en el campo durante más de cuarenta años, solía decirle "buenas mozas" a sus pacientes ancianas para dejarlas contentas. Estas tres señoras quizás hayan roto muchos corazones en sus tiempos mozos y al menos la de la derecha, Delfa, cuando joven, fue nada menos que modelo del escultor José Belloni.