martes, 31 de enero de 2012

En otra cosa

Era el sábado de carnaval y el tradicional grupo carnavalesco "Cordao da Bola Preta" desfilaba por el centro de Rio haciendo un gran alboroto. Muchos de los festejantes iban disfrazados y otros tantos (a veces los mismos) llevaban su botellita pudorosamente disimulada dentro de una bolsa de papel a la que le daban (a la botellita, claro) apasionados ósculos cada pocos pasos. De este modo, y antes de que hubiese transcurrido mucho rato, algunos fiesteros se hallaban dedicados con ahínco a dormir la mona y a soñar con los pocos días de desenfreno justificables que tenían por delante.