miércoles, 3 de agosto de 2011

Orwelliano

Deberán perdonar mi insistencia sobre el tema, pero estoy convencido de que estamos bajo vigilancia, o al menos yo lo estoy. No es nada nuevo, lo vengo percibiendo desde hace ya bastante tiempo. Esta irrefutable prueba, por ejemplo, la obtuve en 1998, apenas 14 años después de lo de Orwell. No sé si en este caso se trataba o no del Gran Hermano, pero sí que me contemplaba con una mirada aviesa que no prometía nada bueno.