martes, 15 de febrero de 2011

Aladas

Eso de tener alitas tienes sus ventajas: aparte de poder ir por ahí revoloteando como un pájaro, en el caso de las niñas y niños pequeños, contar con un par de ellas los autoriza a quedarse levantados hasta la medianoche, como en este caso, en que las angelitas retratadas participaban de la procesión nocturna del Viernes Santo en la antigua población de Goiás Velho, en el centro de Brasil.