Siempre pienso en Buenos Aires como en una ciudad cuyos habitantes -en particular, las mujeres- van vestidos a la última moda, o al menos, de manera moderna. Sin embargo, mirando bien, uno puede descubrir notorias excepciones, pues gente anticuada hay en todas partes.jueves, 16 de diciembre de 2010
Anticuada
Siempre pienso en Buenos Aires como en una ciudad cuyos habitantes -en particular, las mujeres- van vestidos a la última moda, o al menos, de manera moderna. Sin embargo, mirando bien, uno puede descubrir notorias excepciones, pues gente anticuada hay en todas partes.