sábado, 31 de julio de 2010

Noche y bruma


Ayer, cuando salí de la agencia, pasada la medianoche, la niebla ocultaba parcialmente la Plaza Independencia, tornando irreales y distintas las siluetas de los objetos y lugares habituales. Me gusta como se ven las cosas y la gente a través de la bruma, todo se parece a un sueño o a un escenario cinematográfico. En noches como ésta, no puedo evitar pensar en la genial "M" (Fritz Lang, 1931), aunque cruzo los dedos para que el asesino esta vez no se materialice.