Oscuridad

En ese rincón de la feria de Tristán Narvaja en particular ocurría algo extraño. Estaba más oscuro que en las zonas aledañas y únicamente conseguía ver algo a través de unas curiosas ventanas colocadas aquí y allá, un poco al azar. Muy raro, realmente.

Bellas

Comprobé que lo que me habían dicho era cierto: en la Ciudad Vieja de Montevideo es dado ver bellas jóvenes que se acercan a nosotros tentadoras, debemos en todo momento permanecer atentos para no caer víctimas de sus melifluos encantos.

En la jungla

Se habla mucho de la "jungla de cemento" y yo creo en su existencia. Al menos cuando ando en las inmediaciones de mi casa suelo frecuentemente cruzarme con algunos animales salvajes y no me refiero únicamente a los que se desplazan en dos patas.

Escalera al cielo

Me aseguraron enfáticamente que esa era la escalera al Cielo, pero yo no me lo creí; el arcángel que supuestamente custodiaba la entrada me pareció un tanto desmadejado, qué sé yo...

Indiscretos

Hay algunos que no pierden la ocasión de escuchar la conversación de otras personas a quienes no conocen, abiertamente y sin pudor. Realmente, no puedo entender qué es lo que tienen en la cabeza.

Fachada

Hace muchos años que vengo trabajando el tema de los muros y fachadas de comercios en las ciudades. Esta imagen es de 2006 en una parte vieja de Delhi, aunque no en la Antigua Delhi.

Técnica mixta

Algunas intervenciones urbanas poseen una técnica mixta, que incluye los ya mencionados graffitis, pero también tags, afiches arrancados, pintura descascarada, columnas de hierro oxidado y demás procedimientos. Todo muy creativo, sin duda.

Prisioneros

Perdido entre graffitis, tags y rejas de seguridad, el habitante de la ciudad se siente por momentos preso en una telaraña de la que es difícil desprenderse, aunque debo reconocer que para ciertas mentes retorcidas como las de un fotógrafo urbano, no carece sin embargo un cierto atractivo.

Cambalachesco

Algunas paredes grafitadas me recuerdan al tango de Discépolo de 1934 "Cambalache" (link). Pasan los años y algunas cosas no cambian, al menos no en su esencia, quizás sí en la superficie, pero eso es lo de menos.

Se va el verano

Se acaba el verano. Cada vez hay menos gente en la playa, los audaces deportistas tienen un público cada vez más reducido y pasivo durnte su intensos partidos de lo que sea. Ya no esperan aplausos.

Víctimas propiciatorias

No lo podía creer. Estuve un momento mirándolos desde una distancia prudencial, totalmente distraídos y ocupados en sus ridículas bicicletas, las que con total falta de criterio habían dejado estacionadas junto a esa casona en ruinas de aspecto sombrío. No sé en qué estaban pensando ni si se habían percatado del personaje de aspecto más bien siniestro que, asomado a un balcón a punto de desmoronarse no les quitaba los ojos de encima. Para peor, caía la noche. Se me ocurrió que la cosa iba a terminar como en un libro de Stephen King y procedí a realizar un discreto, pero acelerado mutis por el foro. Hay gente que se regala, realmente, "víctimas propiciatorias", creo que los llaman.

Para la abrasadora sed

Agua, agua para calmar la sed  pronta para ser consumida por los corredores de una corta carrera de 16 km (bueno, no tan corta), esta tarde en la rambla a la altura del Club de Golf. Todo muy prolijamente geométrico, como le habría gustado al mismo maestro Cartier-Bresson.

Entradas

Con frecuencia me ocurre que delante de mí se abran varios caminos, algo así como puertas a realidades alternativas, lo que me obliga a detenerme a reflexionar cuál tomar. Temo estar leyendo demasiada ciencia ficción en estos días.

Del espacio

Estaban allí reunidos, disfrutando del atardecer de un día glorioso de fines del verano cuando lo vi, o mejor dicho, mi astuta cámara captó al monstruo del espacio exterior que los sobrevolaba a baja altura, quién sabe con qué aviesas intenciones. En ocasiones se torna difícil y hasta riesgosa la vida en ta Tierra.

De ciencia ficción

Esta tarde estuve en una ciudad de ficción, o mejor dicho, de ciencia ficción, aunque debo decir que el supuesto domo de protección parecía un tanto deteriorado...

Mujercitas

Para celebrar también a mi modo, o sea con fotos, el Día Internacional de la Mujer, aquí va esta imagen tomada en el barrio parisino de Montparnasse hace ya una vida. Me pregunto qué habrá sido de la vida de esas tres, espero que les haya ido bien, lucían tan alegres esa mañana, tres niñas hijas de inmigrantes que jugaban inocentemente sin pensar en el mañana.

Demasiada información

Desisto. Mi pobre cerebro no consigue procesar tanta información, hay demasiados anuncios o avisos, creo que de ahora en adelante me voy a limitar a ver las figuritas sin tratar de leer los textos.

Sufriente

Hoy fue el último día del carnaval, del oficial al menos. Los que no se han tomado toda la semana para descansar aprovecharon la jornada para dedicarse a actividades más o menos agotadoras, como el joven de la foto, sufriendo lo indecible en la rambla frente al dique Mauá..

Bajo ataque

El "ataque de las cianobacterias" (parece el título de una película de ciencia ficción clase B de los años cincuenta) ha dejado desierta  o casi, la playa Ramírez. Al menos casi nadie se mete en el agua, pero algunos heroicos bañistas se mantienen en forma practicando deportes de alto riesgo para estar prontos para el momento del contraataque, que las "aguas de marzo" (link) aún no llegan.

Placentero

Al atardecer el sol se retira a descansar tras habernos castigado durante todo el día y junto al mar corre una bienvenida brisa que nos alivia; es el momento de salir a disfrutar de la rambla.