lunes, 11 de febrero de 2019
Yemanjá VIII
L
a mar -o el río, si quieren- estaba picada y no era fácil conseguir que las barcas-ofrendas se alejasen mucho de la orilla, pero igual no importaba, el territorio de la diosa comenzaba en la orilla de todos modos.
‹
›
Inicio
Ver versión web